De etnias y culturas: Un festival de danza y música

La sociedad europea actual vive un flujo de inmigración que a lo largo de los años se ha visto incrementado a niveles abismales. A manera de ejemplo La zona mediterránea, Italia, España, Portugal y Grecia han experimentado un cambio radical, dado que ha pasado de ser emisora de emigrantes de la zona central a ser receptora de inmigrantes. En España, especialmente en la autonomía vasca la inmigración corresponde al 5% de la población total vasca siendo el 50% de ésta procedente de países latinoamericanos: Colombia, Ecuador, Bolivia, Argentina y resto de países americanos. Y el otro 50% se reparten entre europeos, asiáticos, marroquíes. Así pues la confluencia de diversas y diferentes culturas y grupos étnicos ha traído un sinfín de nuevos conceptos y formas de vida que, lejos de adaptarse al sistema, se han focalizado como existentes pero poco participativos.

La necesidad imperiosa de estos pequeños o no grupos étnicos de involucrarse o sentirse parte, ya no sólo como partícipes de la economía, de estas nuevas sociedades o sistemas, ha derivado en la participación de los mismos en algunos de los “huecos” en los que se les ha permitido intervenir; pero su participación o influencia dentro aún es limitado.

Se entiende por cuestiones de factibilidad que estos nuevos grupos que se incorporan a una nueva sociedad lo hagan a partir de unos parámetros en los que se buscará enseñar y promover entre los mismos los estilos de vida que la sociedad receptora tiene predeterminados.

Pero el resultado de este proceso permite que la participación por parte de estas nuevas colonias sea de acuerdo a los “Formas”, por llamarlos de alguna manera, de la nueva sociedad sin siquiera pararse a preguntar ¿Qué es lo que cómo cultura pueden aportar a esta sociedad que los acoge?

La cultura es el conjunto de todas las formas y expresiones de una sociedad determinada. Como tal incluye costumbre, prácticas, códigos, normas y reglas de la manera de ser, vestimenta, religión, rituales, normas de comportamiento y sistemas de creencias. Es el eje que mueve los pueblos. Las cuestiones culturales son el arraigo más propio y característico de cualquier comunidad. Ahora bien, el permitir en mayor o menor medida un mestizaje cultural es una tarea difícil en cuanto la sociedad receptora mire con autocomplacencia y de lado estos nuevos enfoques culturales.

Esta claro que toda sociedad tiene un bagaje cultural y coexistir con diferentes sociedades, con sus diferentes historias y pasados resultaría complicado cuando no un poco imposible. Pero es cierto también que toda cultura, toda sociedad tiene algo de positivo que aportar por y en sí misma a cualquier otra sociedad y si la razón de peso de cualquier sociedad, y no sólo Europa, es la coexistencia pacífica, sana y productiva pues el permitir que estas nuevas sociedades adheridas al sistema preestablecido expresen lo que esperan, muestren su cultura, el por qué de su búsqueda de bienestar social en tal o cual sitio y no en otro; así como la forma de hacer las cosas fortalecería en mayor y positiva medida la interrelación humana entre los mismos.

Si comprendiésemos y aceptásemos, a partir de dicho preconocimiento, las diferentes etnias que viven y coexisten a nuestro alrededor sería productivo para la mejora y prosperidad de la sociedad y sus diferentes ámbitos que la componen. El ámbito cultural es la manifestación clara de los pueblos así a través de su idiosincrasia, su vestimenta, su música, a manera de ejemplo, nos dan a conocer como son y el carácter de los mismos.

Así pues la puesta en marcha de prácticas culturales permite conocer, acercarnos e involucrarnos en éstas nuevas sociedades pero para ello habría que preguntarles o investigar cómo y en cuánto pueden aportar a la sociedad receptora. No sólo que esperan de la misma sino en que medida su aportación resultaría positiva, en este caso, a la sociedad vasca. Ya que una sociedad multicultural con aceptación en la práctica resultaría fructífero y productivo a la sociedad en general.

Entonces, la cuestión a responder es ¿Qué puedo, yo como nuevo grupo étnico aportar a la sociedad vasca? ¿Mi cultura se siente?, la gente me reconoce pero ¿entiende mis conceptos y formas de vida, y en eso incluyo: bailes, comidas, concepciones y creencias?

El objetivo a corto plazo no será pues otro que a través de un festival de danza y música dar a conocer nuestra cultura como forma de comunicación e integración y hacer partícipes a la sociedad receptora de nuestras capacidades y aportaciones culturales.

De etnias y culturas: un festival creado por tres conceptos a alcanzar:

Identidad: Para que los grupos de inmigrantes se reconozcan como tales dentro del nuevo contexto social. Para que el encuentro con otra cultura no se viva como una amenaza para la identidad es necesario que esta última sea reconocida y respetada.

Integración: se pretende dar a conocer a estos nuevos grupos como parte activa de la nueva población de Bilbao y sus alrededores.

Desarrollo: Ya que la identidad y la integración solo puedo aportar desarrollo a estas nuevas comunidades así como a la sociedad vasca en general.

Y todo esto por considerar fundamental la difusión de los valores positivos del encuentro y el intercambio de culturas.

"Por un mejor entendimiento y convivencia, por una solidaridad y acciones en común, por una puesta en marcha de conceptos iguales, por una aceptación y un reconocimiento, por unas culturas que conviven entre nosotros"

Señores, mi Tesis...

Leslie